¡Qué guapa eres, Carmen!
De esta manera ayer en el Teatro Price de Madrid se agasajaba a la portentosa garganta y veterana cantaora de flamenco Carmen Linares que en el XIX Festival de Flamenco Caja de Madrid estrenaba su espectáculo dedicado a la memoria del inigualable y precursor de la introducción de la poesía de los grandes poetas españoles en el flamenco, Enrique Morente.
El espectáculo centrado en la poesía del poeta Miguel Hernández, contaba también con la colaboración de Tino di Geraldo, percusionista jazzístico y con Tomasito cantaor y bailaor jerezano poco corriente en cuestiones del más puro baile y cante flamenco pues en su estilo rompedor puede hacer guiños al rap o hacer un taconeo sentado en una silla.
La parte poética acompañada de cajón, guitarra o de los momentos más intensos y de más profundo sentimiento como el acompañamiento al piano de la voz de la maravillosa Carmen Linares se entremezclaba y rompía con el torbellino y la raza de Tomasito y su grupo de coros y palmeras cerrándose el show con la poesía de M. Hernández "Casilda del sediento" en la prodigiosa voz de Carmen Linares como tributo al llorado Enrique Morente.
El espectáculo Oasis Abierto no defraudó y es que ver a Carmen Linares con todo su poder expresivo es todo un lujo para los sentidos y no apto para los carentes de sensibilidad.En estos tiempos de crisis ver a Carmen Linares es un refugio.
“Oasis abierto a todas las arenas del desierto” (Miguel Hernández)
Arena del desierto
Soy, desierto de sed
Oasis es tu boca
Donde no he de beber
Boca: oasis abierto
A todas las arenas del desierto
Húmedo punto en medio
De un mundo abrasador,
El de tu cuerpo, el tuyo
Que nunca es de los dos
Cuerpo: pozo cerrado
A quien la sed y el sol han calcinado
